Francisco De Luna
Zozocolco, Ver.-Su significado es lírico. Está
inspirado en la artesanía y en uno de los principales elementos de la cultura
indígena. Zozocolco: “Lugar de los cántaros del sol”. Y no es para más cuando
este municipio totonaco, está rodeado de incontables pozas con aguas
cristalinas, frías y profundas.
Aquí los nombres de las pozas van desde los comunes
como “La Junta”, hasta aquellos que pueden causar un poco de temor y no querer
nadar en “La poza del diablo”; aunque hay otros más románticos como “El
callejón”.
Pero para los lugareños uno de los sitios más bellos
es al que nombran como “El caliche”, un sitio rocoso, de paredes extrañas y
rasposas que durante milenios han formado caprichosos pasadizos.
Se trata de una roca que mide más de diez metros,
pero que a su vez une a los cerros por donde escurren las frescas aguas. Abajo
se ha formado una especie de arco y túnel para dar paso al arroyo, aunque justo
debajo de El caliche, una poza extensa, con profundidad y agua verde color
esmeralda asombra a la vista, la cual no espera e invita a ser fotografiada.
Aquí es momento de guardar la cámara, quedarse
quietos, sentir la frescura, escuchar el trinar de las aves, poner atención al
suelo mojado, a las rocas resbalosas y admirar la hermosura en un espacio que
de pronto no se sabe si es extenso, porque las imágenes son constantes y los
ojos no se dan abasto.
Estás en un lugar de vegetación excesiva. Arriba se
notan las raíces que cuelgan de algunos árboles longevos, esos que se aferran a
la tierra como ahora a nuestros recuerdos. Ahí apenas unos rayos del sol pueden
penetrar y tocar las aguas. Hay una claridad como queriéndose perder en el
limbo de la oscuridad.
El
túnel milenario
En El caliche pareciera que nada es serio, aunque la
naturaleza no juega a engañar. En los paredones que están por quedar unidos y
formar una caverna, sobresalen figuras proyectadas por la imaginación. Se puede
observar un rostro cadavérico, algún felino, siluetas que asemejan alguna
deidad prehispánica.
Lo cierto es que en el arroyo grandes extensiones de
paredes formadas por piedras recorren entre bejucos, hierbas, manantiales y
humedad, para terminar en pozas, cascadas y pequeñas caídas de agua.
Esta naturaleza está en la ranchería Tahuaxni,
nombre en totonaco que significa “escarbado”, pues de acuerdo a la historia de la localidad, una
plaga de chapulines cubrió esas tierras y la única manera de acabar con ello,
era enterrándolos.
Para llegar a El caliche, anticipamos que es
necesario contar con un buen calzado, de preferencia botas, porque los caminos
son casi intransitables, hay que abrirse paso entre la vegetación y sujetándose
de troncos y raíces salientes o de lo contrario caerán al vacío.
Se trata de un túnel milenario. Para atravesarlo se
requiere de mucha astucia y nada de miedo al agua porque la poza es demasiado
profunda y unos cinco metros de largo pero oscuro en su trayecto.
Los esfuerzos al recorrer este pequeño “paraíso” bien valen las caídas, resbalones, el temor y adrenalina que se llega a sentir entre esas casi desoladas veredas, pues en el paso apenas se observan seis chozas metidas entre la vegetación.
Cada paso es asombroso, más aún en el arroyo donde a
la vuelta hay cascadas, pozas profundas y otras no tanto para meter los pies,
lavarse la cara o el pelo para saciar el cansancio rural.
Tan cristalinas están las aguas que se puede admirar
a las acamayas, los peces y tortugas que se esconden entre las rocas. Y cuando
los parroquianos acuden a pescar, se avientan los clavados, se les ve nadar en
el fondo y sacar algunas especies porque son parte del platillo que cenarán
luego de una intensa jornada en la milpa.
Se trata de sitios mágicos que se descubren al
caminar en las entrañas de Zozocolco, municipio ubicado en la zona norte del
estado de Veracruz. Una región totonaca que se extiende en las montañas.
Pisar estos terrenos también es cansancio, pero en
ellos se deja el estrés citadino. Aquí las postales aparecen en cada espacio:
en el monte, en las aguas o callejones empedrados de “Los cántaros del sol”.
Hola, podrias enviarme mas info acerca de tu travesia ? por favor.. planeo visitarlo pero me aterre al leer algo de tu escrito ( por mis miedos )
ResponderEliminar